Hace apenas unos años, mencionar al Wrexham AFC en una conversación sobre la Premier League parecía una broma. Hoy, la historia es distinta. El club galés, que en 2021 militaba en la quinta división del fútbol inglés, acaba de lograr su tercer ascenso consecutivo, una hazaña inédita en la historia moderna del fútbol británico.
Y todo esto bajo la mirada de Ryan Reynolds, el carismático actor de Deadpool, y su socio Rob McElhenney, creadores de una historia tan improbable como cinematográfica. Desde su llegada, la dupla ha convertido al Wrexham en una mezcla única de entretenimiento, estrategia deportiva y ambición empresarial.
“Recuerdo cuando me preguntaron hasta dónde llegaríamos, y dije que a la Premier League. Se rieron. Ya no se ríen.” — declaró Reynolds tras el último ascenso. Y razón no le falta: el club está ya en Championship, a solo una categoría del cielo futbolístico inglés.
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De la National League al umbral de la élite
El ascenso meteórico del Wrexham ha sido, literalmente, un cuento de hadas con guion de Hollywood. En 2021, el club militaba en la National League, una categoría semiprofesional. En 2022, logró su primera promoción a la League Two; en 2023, repitió el éxito hacia la League One; y en 2024, volvió a dar el salto, esta vez hacia la Championship, la segunda división inglesa.
Nunca antes un club había conseguido tres ascensos consecutivos desde la fundación de las ligas profesionales. Ese récord histórico es ya una muestra de lo que significa este proyecto: una mezcla de dinero, carisma y gestión deportiva eficaz.
Sin embargo, el reto que ahora se avecina es completamente distinto. Por primera vez desde que los nuevos dueños tomaron el mando, el Wrexham ya no parte como favorito. La Championship es un entorno feroz, donde la diferencia entre el éxito y el fracaso puede medirse en detalles mínimos.
Las frías estadísticas del ascenso
Para entender el desafío, basta con mirar los datos. En las últimas 12 temporadas, 36 clubes han ascendido de la League One a la Championship. De ellos:
- 25 equipos (69%) lograron mantenerse en la categoría.
- 10 (28%) descendieron inmediatamente de nuevo.
- Solo 1 equipo (3%) consiguió ascender a la Premier League en su primera temporada: el Ipswich Town.
Esa cifra refleja una dura realidad: es nueve veces más probable que un club recién ascendido descienda que logre llegar a la Premier League.
Y sin embargo, el Wrexham tiene razones para creer. Las similitudes con aquel Ipswich son notables.
El espejo de Ipswich: ¿una inspiración o una advertencia?
Bajo la dirección de Kieran McKenna, el Ipswich Town vivió una trayectoria tan vertiginosa como la del Wrexham. En la temporada 2022/23, ascendió de la League One con 98 puntos y +66 en diferencia de goles. Un año después, volvió a hacerlo, alcanzando la Premier League con 96 puntos y +35.
El Wrexham, por su parte, terminó su campaña 2023/24 con 88 puntos y +37, y en la siguiente, alcanzó el ascenso con 92 puntos y +33. Números casi calcados.
Pero la historia no terminó bien para los de McKenna. En su primera temporada en la Premier League, Ipswich solo ganó cuatro partidos, finalizó con una diferencia de goles de -46 y descendió en el puesto 19.
Esa es la advertencia que Michael Williamson, director ejecutivo del Wrexham, tiene muy presente:
“No tengo duda de que podemos llegar a la Premier League, pero queremos hacerlo preparados. No queremos subir para volver a caer. Queremos permanecer allí.”
Dinero, planificación y cultura ganadora
A diferencia de otros proyectos que apostaron únicamente por la billetera, el Wrexham ha intentado equilibrar el gasto con una estructura deportiva moderna y sostenible.
Reynolds y McElhenney no solo invirtieron en fichajes, sino también en infraestructura, formación y tecnología de rendimiento. El club cuenta hoy con un departamento de análisis de datos que rivaliza con el de varios clubes de Premier, y un modelo de scouting centrado en jugadores subvalorados de divisiones menores o ligas extranjeras.
Su filosofía es clara: comprar inteligencia antes que fama. Y, hasta ahora, ha funcionado. El cuerpo técnico ha sabido mantener una cultura de vestuario sólida, con jugadores que entienden que cada ascenso fue producto del trabajo y no de la casualidad.
Un club con alma y una marca global
La clave del éxito del Wrexham no se limita al césped. Su crecimiento como marca global ha sido meteórico.
Gracias a la serie documental “Welcome to Wrexham”, producida por Disney y FX, el club ha alcanzado una exposición sin precedentes. Hoy, el Wrexham vende camisetas en Estados Unidos, Canadá, Australia y Japón.
El estadio Racecourse Ground, el más antiguo del mundo aún en uso para fútbol profesional, se ha convertido en un santuario moderno, con entradas agotadas desde hace dos temporadas.
Esa mezcla de historia, narrativa hollywoodense y resultados tangibles ha convertido al Wrexham en un fenómeno de marketing deportivo. Y eso tiene un impacto directo en su competitividad: más ingresos significan mejores fichajes, más inversión y más estabilidad.
El desafío de la Championship
Sin embargo, todo ese impulso emocional se enfrentará al muro de la realidad: la Championship es una liga brutal. 24 equipos, 46 jornadas y un calendario implacable.
Los clubes descienden de la Premier con presupuestos diez veces mayores y estructuras de élite. Los recién ascendidos, por el contrario, deben adaptarse rápidamente a un nivel de exigencia física y táctica muy superior.
El Wrexham tendrá que afrontar su temporada como un outsider, con la mentalidad del que no tiene nada que perder. Y, en las apuestas, eso puede jugar a su favor.
Las principales casas de apuestas colocan actualmente al Wrexham con una cuota de 6.50 para ascender a la Premier League y de 2.75 para mantenerse en Championship. La probabilidad implícita de ascenso, por tanto, ronda apenas el 15 %. Pero este club ha construido su reputación precisamente en torno a romper las estadísticas.
¿Qué necesita el Wrexham para lograrlo?
- Refuerzos estratégicos: El salto de nivel exige una plantilla más profunda. El club necesita reforzar la defensa central y añadir un mediocentro de contención con experiencia en Championship.
- Gestión emocional: Los ascensos sucesivos han mantenido alta la moral, pero la Championship puede ser despiadada. La clave estará en mantener la fe incluso en las rachas sin victorias.
- Adaptación táctica: Su estilo ofensivo y directo funcionó en ligas inferiores, pero en Championship deberá volverse más flexible. Equipos como Norwich o Leeds pueden castigar cada error con contundencia.
- Rotación inteligente: Con un calendario tan largo, la gestión física será vital. Evitar lesiones será un reto constante.
- La energía de la afición: Pocos clubes tienen una conexión emocional tan fuerte con sus seguidores. El Racecourse Ground será una fortaleza, y los hinchas lo saben: cada punto en casa puede marcar la diferencia.
El límite entre el sueño y la historia
El Wrexham AFC ha desafiado todas las probabilidades desde el día en que dos actores de Hollywood decidieron comprar un club galés de quinta división.
Tres ascensos consecutivos después, el sueño de la Premier League ya no suena a locura. Pero la Championship será su examen más duro: una liga sin margen de error, con gigantes dormidos y un ritmo implacable.
Sin embargo, si algo ha demostrado este equipo, es que las estadísticas no pueden medir la pasión.
Con una gestión inteligente, una afición devota y una narrativa que combina emoción y estrategia, el Wrexham podría escribir el capítulo más improbable de la historia reciente del fútbol inglés.
Tal vez no sea este año, tal vez sí. Pero una cosa es segura: ya nadie se ríe cuando Ryan Reynolds habla de la Premier League.
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